Wednesday, November 29, 2006

Khadra, Yasmina. EL ATENTADO. Alianza Editorial, 2006. 220 páginas. 16 euros.

Yasmina Khadra, seudónimo del comandante del Ejército argelino Mohamed Moulessehoul, nos presenta una obra que en un principio posee todas las trazas de ser una novela de acción. En cierto modo lo es y, además, con intriga, pero lo que el autor busca es elaborar un retrato psicológico, y lo consigue con gran maestría.

No se trata sólo de que el doctor Amín Jaafari (el protagonista e israelí de origen palestino) sea perfectamente retratado con su dolor, angustias, celos... al saber que su mujer Sihem se ha inmolado como terrorista suicida en Tel Aviv; no es sólo eso, repito. La persona del médico servirá de conducto por donde pasarán una galería de personajes que serán objeto de su tradicional maestría para trazar retratos psicológicos.

Con una prosa estudiadamente tosca (aunque no faltan momentos de lirismo), con unos diálogos cortantes y precisos, crea un ambiente que refleja muy bien los sufrimientos de palestinos y judíos siempre en guerra, a lo largo de esta gran novela.

Tanto el autor como su principal protagonista son musulmanes. Esto quizá explique un sentimiento de Dios distante, la presencia del odio y la venganza continua, y una interpretación de la vida sin horizontes sobrenaturales, pues el Paraíso se pospone a la cruel venganza, aunque ésta acarree la propia muerte.

En suma un libro interesante, bien fabricado. Más propio para adultos.

Thursday, November 16, 2006

Trollope, Fanny. USOS Y COSTUMBRES DE LOS AMERICANOS. Alba Editorial, 2001. 479 páginas.

Como bien se puede deducir del título de esta obra, se trata de un libro de viajes. Viajes que la autora realizó durante dos años – 1827, 1828 - por E.E.U.U. con su familia, en busca de una nueva vida y un golpe de fortuna; fortuna que les había dado la espalda en Inglaterra, cubriendo de deudas a los Trollope.

Hasta ese momento ella no era escritora, pero fue tal el éxito de su libro (reeditado varias veces), que se convirtió en una autora muy popular, publicando más de 35 novelas.

Aunque Fanny Trollope se excusa en diversas ocasiones, diciendo que su opinión sobre América no vale nada, que no conoce el país en su conjunto, que se trata de un mero “cotilleo”, no deja de criticar negativamente – con mucho tacto, eso sí - todos los aspectos del entonces joven país, que no se parezcan a los europeos y, en concreto, a Inglaterra. Pese e ese complejo de superioridad, no todo es negativo; hay “usos y costumbres” que le admiran, personas dignas de imitar y, sobre todo, los paisajes; pero, según afirma en uno de los prólogos, “había cosas que le sorprendían y hacían gracia”. Eso es lo que pretende para sus lectores: que pasen un rato divertido conociendo a sus “primos” del otro lado del mar.

En ocasiones sus juicios son sensatos y describen bien el alma americana, pero en otros se equivoca de medio a medio. Por poner un ejemplo: la República y la democracia. O también el excesivo puritanismo, precisamente heredado y llevado por los colonos ingleses siglos atrás.

Mención a parte merece su estilo sencillo y claro, como quien está contando a unos interlocutores sus vivas experiencias. Destaca por encima de todo en las descripciones geográficas, de ciudades, ambientes rurales.

Quizá un factor importante del éxito de este libro en su tiempo, fue la presumible avidez de los ingleses por conocer el continente americano y sus habitantes a los que, en el fondo, estaban muy unidos. La buena pluma de Fanny Trollope ( madre, por cierto, del famoso novelista Anthony Trollope), hizo lo demás.

Wednesday, November 15, 2006

Némirovsky, Irène. SUITE FRANCESA. Edita Salamandra, 2006. 473 páginas. 19 euros.

La fama, como excelente escritora, de Irène Némirovsky fue decreciendo en Francia cuando las primeras reacciones antisemitas aparecieron crudamente en Europa y, sobre todo, con el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Además, siendo ciudadana rusa (Francia no le concedió la nacionalidad a pesar de vivir en ese país desde pequeña), estaba expuesta a una detención en cualquier momento, cosa que no se produjo hasta Agosto de 1942. Muere en Auschwitz ese mismo mes. Tenía 39 años.

SUITE FRANCESA es su última novela e inacabada. Fue publicada muchos años después, gracias a que sus dos hijas conservaron el manuscrito. Se trata de una obra de gran calidad, donde se reflejan los momentos de la Segunda Guerra Mundial en Francia. De una manera desgarrada y épica nos narra en su primera parte, la huida de muchos ciudadanos franceses hacia el sur, buscando salvarse del acoso del ejército alemán.

Junto a la crudeza del relato y la aparición de personajes egoístas y sin escrúpulos para nada; y el pesimismo de comprobar cómo “el hombre es lobo para el hombre”, cuando se trata de salvar la vida a costa de otros, o sus posesiones. Junto a esa crudeza estremecedora, digo, nos encontramos con la belleza. Sí. No hay una sola línea en la que no se aprecia la pulcritud, naturalidad y frescura de su estilo literario.

Es una escritora que irrumpe en el terreno privado del lector y lo desarma, tanto por la belleza, como por la trama argumental.

Con una segunda parte más reposada, en la que adopta un esquema más novelístico, concluye la obra. Aquí el amor, el odio, el miedo son los principales argumentos que sustentan unos personajes mucho más cercanos. Cambiando de un estilo directo a otro indirecto y con breves monólogos interiores enriquece plásticamente la obra y perfila hasta el extremo el carácter de los personajes. Sin duda una gran novela de la que cabe la satisfacción de conocer el final, gracias a la minuciosidad en el sistema de trabajo de la autora: largas anotaciones juzgando y pergeñando su trabajo, que los editores han añadido cómo apéndice final, junto con un epistolario muy interesante.

Friday, November 10, 2006

Andersch, Alfred. EL PADRE DE UN ASESINO. Belacqua, 2006. 128 páginas. 15 euros.

Alfred Andersch es un autor muy poco conocido en España, pese a su vasta producción literaria: novelas, ensayos, obras de teatro y artículos periodísticos. Nació en Munich en 1914 y falleció en Suiza en 1980, justo un mes después de escribir esta novela corta excelente que es EL PADRE DE UN ASESINO. Se publicó después de su muerte y obtuvo un gran éxito; fue alabada como una de sus mejores obras.

Sus orígenes artísticos son de tendencia comunista; militó en el Partido Comunista Alemán hasta ser detenido poco antes de la Segunda Guerra Mundial, a la que fue obligado a ir como soldado. Después de diez años en Munich trabajando en diversos periódicos y dedicándose también a escribir sus novelas, etc., marchó a Suiza, donde gozó de 22 años de tranquilidad creativa; allí se casó y tuvo cuatro hijos.

EL PADRE DE UN ASESINO es una pequeña joya literaria. En ella el autor nos describe los, a su juicio, temas más importantes de la vida ( la libertad, el honor, el trabajo, la política...) en un transcurso temporal de unos cincuenta minutos; lo que dura la clase de griego en un colegio de Baviera, donde el director ha entrado para inspeccionar, aparentemente, los conocimientos de los alumnos. Los sucesos que se narran son reales y vividos por Andersch en su juventud. Para ello el autor se vale de diversas técnicas literarias que combina con una gran maestría y, lejos de ofrecer un relato confuso, la claridad impera totalmente. Pasa de estar narrando en tercera persona a primera persona sin solución de continuidad; en ocasiones esta última técnica se convierte en un monólogo interior, del que irán de la mano, con suavidad, dos o tres flash back, de los que se vale para explicar mejor los angustiosos momentos que pasan los alumnos ante los abiertos ataques personales del director. Realmente consigue crear una atmósfera opresiva que se transmite al propio lector.

En las últimas páginas, que son para el lector, explica los motivos por los cuales ha escrito así y por qué ha tratado esos temas en concreto. La explicación es una clase de buenos oficios en el literato, que da gusto leer y ponderar. Pero quizá la razón definitiva es que el director es el “viejo Himmler”, padre de Heinrich Himmler, el Segundo de Hitler, que masacró a millones de judíos.

EL PADRE DE UN ASESINO es de esas novelas que se lee de un tirón (dos horas), porque son bellos tanto el estilo como el ambiente que recrea; califico de bello también el ambiente, por la maestría con que introduce al lector entre las cuatro paredes del aula de griego.

Thursday, November 09, 2006

Mankell, Henning. EL CEREBRO DE KENNEDY. Tusquets, 2006. 340 páginas. 20 euros.

Cuando todos esperábamos una nueva novela de Mankell, con Linda Wallander como protagonista, el autor nos presenta un trabajo que muy posiblemente pase a engrosar los de la SERIE AFRICANA.

Como se sabe, Mankell vive la mitad del año en Mozambique. Ello le confiere bastante credibilidad a esta historia sobre el SIDA, porque ese es el argumento de la novela: esa enfermedad, en concreto en el África Negra, narrada con un soporte de ficción convincente y unas buenas dosis de aventura, intriga policíaca e, incluso, con momentos de suspense mucho más intensos que en otras novelas.

Henning Mankell es un escritor con oficio y veteranía; de éxito. Pero después de reconocerle esa valía, hay que afirmar que no es un autor que pasará a la historia de las Letras. Lo digo, porque pienso que se hablará de él en el futuro como un escritor de denuncia social, de protesta ante las injusticias. Este tipo de artistas son invariablemente detectados y analizados. Además, en el caso que nos ocupa, tiene, a mi juicio, toda la razón en sus argumentaciones: me refiero a todas sus novelas.

Pero en EL CEREBRO DE KENNEDY se lanza en tromba hacia las escasas medidas calculadas y corruptas para combatir el SIDA en África e, incluso, apuntar que se experimenta con seres humanos. Algo de esto ya lo mencionó John Le Carré en su novela EL JARDINERO FIEL.

Efectivamente en la África Negra – unos 600 millones de habitantes – hay, según los más optimistas – la OMS – 25 millones de enfermos, aunque otras organizaciones llegan hasta doblar la cifra. También son patéticos otros datos, como que en algunos países el 25% es seropositivo o, que en otros, el 35 % de las mujeres embarazadas también lo son. Y un escalofriante resumen: el SIDA ha propiciado 12 millones de niños huérfanos en esa parte del Globo.

Por último advertir que el estilo Mankell sigue, en ocasiones, igual de premioso (aunque algunos dirán que es prolijo), lo que en esta obra provoca un cierto encharcamiento en el arranque: a mi juicio las 40 o 50 primeras páginas pueden hacer pensar que nos encontramos ante una novela que será floja. Ni mucho menos.

Tuesday, November 07, 2006

He dedicado unas pocas horas a la Feria del Libro de Noviembre. Desgraciadamente, siempre la misma oferta de todos los años: libros sin interés, saldos de edición, coleccionables, divulgativos... nada que invite a compar. Bueno, sí: adquirí un libro que había perdido: 6 euros, una ganga. Se trataba de la obra de Vikram Seth, Un buen partido.

Lo mejor, en los estantes traseros, pasando inadvertidos ante el gran público. Una pena.

Pero me pregunto: ¿han estado los visitantes y curiosos a la altura de una oferta de mayor calidad?